Los seres humanos somos complejos. Estar en contacto con otras personas nos hace enfrentarnos a problemáticas en nuestro día a día. Los conflictos no aparecen de la noche a la mañana. Para que se originen tienen que darse una serie de factores y situaciones que hagan aflorar la problemática, como es el caso de los conflictos estructurales. El conocimiento de los mismos y su detección facilita la resolución de conflictos. Los seres humanos tenemos que ser conscientes de la realidad a la que nos enfrentamos y conocer las características de los conflictos, para poder desarrollar estrategias efectivas, que propicien un acuerdo entre las partes implicadas.
En este artículo tratamos en concreto el conflicto estructural. ¿Qué es un conflicto estructural? ¿Cuáles son las características de este tipo de conflicto? ¿Cómo se pueden abordar los conflictos estructurales?
Qué es un conflicto estructural: definición
Un conflicto estructural por definición no es un conflicto causado por eventos puntuales o circunstancias aisladas, es la consecuencia de un largo período de patrones de comportamiento opresivos, de abuso de poder y de desigualdad persistente y sistemática en la estructura social. En los primeros momentos, antes de que estalle el conflicto, las personas implicadas deben reconocer que las relaciones sociales están diseñadas de manera desigual.
La gestión de los conflictos estructurales es muy importante porque cuanto antes se realice una mediación de estos conflictos de desigualdad, más afectivos serán los resultados, para poner fin a la represión de la estructura social o empresarial. Por este motivo, es fundamental empezar a trabajar cuanto antes, para evitar que el conflicto se desarrolle por completo.
Características de los conflictos estructurales
Es fundamental comprender cuáles son las características de los conflictos estructurales, para entender por qué aparecen. Los conflictos estructurales se originan por situaciones opresivas, por comportamientos desiguales y por la presencia de una diferencia de poder y autoridad.
Causado por situaciones opresivas
La discriminación, el acoso, la exclusión y la marginación son situaciones opresivas que fomentan el desarrollo de conflictos estructurales a largo plazo. Las personas oprimidas se sienten pisoteadas por los opresores, que mantienen un sistema de poder que fomenta la desigualdad y la opresión.
Existencia de un comportamiento de desigualdad
Con base a la existencia de un comportamiento de desigualdad nos encontramos ante una conducta estereotipada, discriminatoria y con prejuicios. Tiene como objetivo principal mantener a ciertos grupos de la sociedad en una escala inferior.
Presencia de una diferencia de poder y autoridad
Un pequeño grupo de personas dentro de la sociedad o de una empresa o instituciones tienen un poder y autoridad desmesurados en comparación con el resto de personas que se relacionan con dichos grupúsculos. La presencia de una diferencia de poder y autoridad permite perpetuar la desigualdad y la opresión.
En qué situaciones surge el concepto de conflicto estructural
Existen tres situaciones en las que se puede desarrollar el concepto de conflicto estructural: en empresas, negociaciones y estatus sociales.
Empresas
Las empresas no están libres de sufrir conflictos estructurales. En el momento en el que la distribución de poder, de autoridad y de recursos es desigual, pueden surgir con el paso del tiempo conflictos estructurales que todavía no se han manifestado. Los conflictos estructurales en las empresas se pueden producir por la brecha salarial y por la falta de oportunidades equitativas de ascenso.
Pero no te preocupes, porque este tipo de conflictos también se pueden solucionar. En nuestro blog puedes encontrar algunos ejemplos de conflictos laborales resueltos.
Negociaciones
El concepto de conflicto estructural también puede aflorar en las negociaciones en el momento en que hay una diferencia de poder y autoridad entre las partes en liza. Un ejemplo que te puede ayudar a entender mejor qué es un conflicto estructural en negociaciones es, cuando una parte de las partes de la negociación cuenta con una posición de poder más elevada que la otra, puede llegar a imponer sus intereses y términos en el acuerdo, lo que puede resultar en una solución desigual e injusta.
Estatus sociales
Los conflictos estructurales también pueden surgir dentro de una sociedad debido a las desigualdades en el estatus social de sus miembros. Los conflictos estructurales con relación a los estatus sociales suelen estar relacionados con la concentración de la riqueza y el poder en manos de un grupo pequeño de individuos de la sociedad. Por lo tanto, el resto de miembros de la sociedad no tiene un acceso equitativo a los recursos ni a las oportunidades disponibles.
Ejemplos de conflictos estructurales
Algunos ejemplos de situaciones en las que se produzcan conflictos estructurales en diferentes contextos, te ayudarán a entender mejor qué es el concepto de conflicto estructural.
Reuniones entre jefes o encargados y otros empleados
Por ejemplo, en una reunión donde se encuentren los jefes o encargados y otros empleados de menor rango de una empresa, puede darse la situación de que las opiniones de éstos no son tomadas en cuenta y no son escuchadas por parte de los jefes, que no las valoran y prefieren imponer las propias. Esto puede suponer una falta de representación por parte de los empleados y una sensación de injusticia en su empresa.
Junta entre los departamentos de un negocio
Otra situación que puede ayudarte a entender en qué situaciones pueden generarse un conflicto estructural puede ser perfectamente una junta entre los departamentos de una compañía. En este tipo de situación, puede haber una brecha en la distribución de recursos y autoridad entre los diferentes departamentos, lo que puede desembocar en una falta de cooperación y una sensación de competencia nociva entre ellos.
Cómo abordar los conflictos estructurales
Aprender a reconocer los conflictos estructurales es el primer paso para saber cómo afrontarlos. Además, te permitirá actuar a tiempo antes de que supongan un problema mayor.
Creación de entornos no tóxicos
Una forma efectiva de abordar los conflictos estructurales es crear un entorno libre y agradable para la discusión. Es fundamental que las partes implicadas en el conflicto se sientan escuchadas y valoradas. Además, deben evitar el uso de lenguaje ofensivo y hostil
Mediación entre las partes
La mediación puede ser una herramienta útil para abordar los conflictos estructurales. Mediante la participación de las personas directamente implicadas en manifestaciones concretas de estos conflictos estructurales y la ayuda de un mediador neutral e independiente, pueden resolverse algunos efectos de este tipo de conflictos.
Fijación de las necesidades y objetivos
Es importante conocer las necesidades y objetivos de cada una de las partes involucradas en el conflicto estructural antes de intentar encontrar una solución. Esto ayudará a garantizar que la solución sea justa y equitativa.
Recursos legales
En algunos casos puede ser conveniente utilizar recursos legales para abordar los conflictos estructurales. Por ejemplo, puede ser necesario presentar una demanda o hacer una denuncia formal para resolver el conflicto.
Acuerdo entre las partes
Resolver conflictos estructurales es difícil, pero sí se pueden paliar sus manifestaciones puntuales a través del acuerdo de las partes implicadas directamente en ellas.
Si estás envuelto en algún conflicto estructural o quieres evitarlos, siempre puedes pedir ayuda de nuestros expertos en mediación.